El Hospital General Puyo dentro de su cartera de servicios brinda atención a pacientes con problemas de cálculos renales. Desde enero hasta agosto de 2019 por consulta en el servicio de nefrología un total de 35 atenciones y por el servicio de emergencia cerca de 105.
Susana Naranjo, nefróloga de esta casa de salud explicó que “Los cálculos renales son formaciones pequeñas y sólidas que pueden aparecer en el tracto urinario. También conocidas como cálculos o nefrolitiasis, las piedras en los riñones se forman cuando las sales y los minerales de la orina se concentran en demasía y se cristalizan. Al cabo de semanas o meses, los cristales pueden agrandarse y formar piedras”.
Hay algunos tipos de cálculos renales como: los cálculos de calcio son los más comunes y se desarrollan cuando el calcio en la orina se combina con otras sustancias y forma cristales. Cálculos de cistina son poco comunes y se forman cuando hay mucha cistina (un aminoácido) en la orina. Cálculos de ácido úrico, se forman cuando hay mucho ácido úrico en la orina, puede cristalizarse por sí solo o combinarse con calcio para formar cálculos.
“Existen factores de riesgos que conllevan a presentar los conocidos cálculos renales como: “La deshidratación, no tomar suficiente agua puede hacer que se concentre la orina y aumente las probabilidades de formación de cristales. Una alimentación y un estilo de vida inadecuados. Las bebidas azucaradas, con cafeína y una alimentación rica en sodio pueden aumentar el riesgo de formación de cálculos de calcio” indicó la especialista.
“Esta casa de salud recibe a muchos de sus pacientes con cálculos renales por el servicio de emergencia donde mediante exámenes de laboratorio se determina si presenta o no la patología, aunque para confirmar el cuadro clínico se realiza una ecografía o radiografía. El tratamiento que se ofrece en la unidad de salud es integral ya que intervienen además las especialidades de: urología y nutrición” manifestó Fabián Chango, director Médico del Hospital General Puyo.
Las recomendaciones para la ciudadanía según Naranjo “Disminuir el consumo de sal y los alimentos salados ayuda a reducir el riesgo de tener cálculos renales, beber mucho líquido durante el día por lo menos tres litros de agua y restringir la cantidad de proteínas: como carnes rojas, lácteos, queso, entre otros” señaló.
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